sábado, 9 de noviembre de 2013
El Banco de España certifica el fin de la Recesión
Según las estimaciones del Banco de España recogidas en su boletín económico de octubre, la economía española salió en el tercer trimestre del año de la recesión técnica, la segunda que ha sufrido desde el estallido de la crisis y la más larga del periodo democrático, tras crecer un 0,1% entre julio y septiembre.
Un país entra en recesión técnica cuando acumula dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo y sale de ella cuando muestra tasas positivas en un trimestre. Con el crecimiento del 0,1% registrado en el tercer trimestre, la economía española entra en positivo tras nueve trimestres de descenso del crecimiento y dice adiós a la llamada recesión técnica.
A lo largo de la crisis, España ha entrado dos veces en recesión. En el tercer trimestre de 2008, por primera vez en 15 años, la economía entró en recesión y salió de ella en el primer trimestre de 2010. La alegría duró poco y la economía española volvió a mostrar tasas negativas a partir del segundo trimestre de 2011, entrando de nuevo en recesión en el tercer trimestre de ese mismo año.
Dos años y medio después, el Banco de España confirma que la recesión técnica ha finalizado. Algunos países de la UE se han adelantado a España y ya abandonaron la recesión en el segundo trimestre de este año, entre ellos Irlanda, Francia, Portugal, Finlandia, Dinamarca y República Checa.
Fuente: http://www.lavanguardia.com
La Balanza de Pagos
La balanza de pagos de un país es un documento contable en el que se registran sistemáticamente las transacciones económicas de todo tipo ocurridas durante un período de tiempo determinado entre los residentes de un país y los residentes del resto del mundo. La balanza de pagos ofrece información sobre muchos aspectos relevantes de una economía, tales como su capacidad competitiva en el comercio exterior; la financiación externa que recibe u otorga; o los movimientos de moneda nacional que se producen, los cuales influyen en su tipo de cambio.
Estructura general de la balanza de pagos
Siguiendo las recomendaciones metodológicas del Fondo Monetario Internacional, la mayor parte de los países agrupan las rúbricas que constituyen la balanza de pagos en tres grandes cuentas (o balanzas): la cuenta corriente, la de capital y la financiera.
La cuenta corriente
La balanza por cuenta corriente engloba prácticamente todas las operaciones económicas corrientes, relacionadas con la economía real (entendida la economía real por contraposición con la economía financiera).
En las rúbricas incluidas en las balanzas de cuenta corriente y capital se anotan como ingresos las operaciones que suponen un incremento de la capacidad de pago (renta disponible) del país y en pagos las que suponen una disminución de la capacidad de pago.
La cuenta corriente se subdivide en cuatro balanzas básicas: Balanza comercial, Servicios, Rentas y Transferencias corrientes.
La cuenta de capital
La cuenta de capital recoge como rúbrica fundamental las transferencias de capital: aquellas cuya finalidad es permitir la adquisición de activos de capital por parte de quien las recibe. También incluye una partida que suele tener valores poco importantes, y que responde a la enajenación de activos no financieros no producidos, como la venta a no residentes de yacimientos de recursos naturales en el subsuelo, así como las transacciones de activos intangibles, como patentes (no su alquiler, que se anota en la subbalanza de servicios). En el caso de la economía española se incluyen aquí, entre otras partidas, los ingresos asociados a fondos europeos como el Feder (Fondo Europeo de Desarrollo Regional) y los Fondos de Cohesión, dada la naturaleza de los gastos a los que se destinan estos fondos.
La cuenta financiera
La cuenta financiera registra las transacciones financieras; esto es, las transacciones de activos y pasivos financieros representativos del mantenimiento de riqueza, tales como dinero, créditos, títulos de propiedades industriales o de deuda pública o privada, o divisas. En España, de la misma forma que ocurre con otros países miembros de la Unión Económica y Monetaria (UEM), desde 2001 la cuenta financiera está estructurada diferenciado las operaciones financieras del Banco de España de las del resto de agentes económicos residentes.
En la balanza financiera las operaciones se anotan en función de si corresponden a una variación de pasivos (de los residentes en la nación frente a los no residentes) o una variación de activos (de los residentes frente a los no residentes). Los efectos económicos de las operaciones que suponen una variación positiva de pasivos (activos) financieros son similares a las que suponen ingresos (pagos) en la balanza corriente: un incremento (disminución) de la capacidad de pago de la economía frente al resto del mundo.
La cuenta financiera está estructurada en distintas subbalanzas, que se diferencian por el tipo de activos y pasivos financieros en que se materializan las operaciones correspondientes: inversiones directas; inversiones de cartera; otras inversiones; derivados financieros; variación de reservas de divisas; y, en España, al igual que en el resto de los países miembros de la Unión Económica y Monetaria (la zona euro), variación de los activos del Banco de España frente al Eurosistema (una subbalanza que no existe en otros países, como EEUU o Japón).
Estructura general de la balanza de pagos
Siguiendo las recomendaciones metodológicas del Fondo Monetario Internacional, la mayor parte de los países agrupan las rúbricas que constituyen la balanza de pagos en tres grandes cuentas (o balanzas): la cuenta corriente, la de capital y la financiera.
La cuenta corriente
La balanza por cuenta corriente engloba prácticamente todas las operaciones económicas corrientes, relacionadas con la economía real (entendida la economía real por contraposición con la economía financiera).
En las rúbricas incluidas en las balanzas de cuenta corriente y capital se anotan como ingresos las operaciones que suponen un incremento de la capacidad de pago (renta disponible) del país y en pagos las que suponen una disminución de la capacidad de pago.
La cuenta corriente se subdivide en cuatro balanzas básicas: Balanza comercial, Servicios, Rentas y Transferencias corrientes.
La cuenta de capital
La cuenta de capital recoge como rúbrica fundamental las transferencias de capital: aquellas cuya finalidad es permitir la adquisición de activos de capital por parte de quien las recibe. También incluye una partida que suele tener valores poco importantes, y que responde a la enajenación de activos no financieros no producidos, como la venta a no residentes de yacimientos de recursos naturales en el subsuelo, así como las transacciones de activos intangibles, como patentes (no su alquiler, que se anota en la subbalanza de servicios). En el caso de la economía española se incluyen aquí, entre otras partidas, los ingresos asociados a fondos europeos como el Feder (Fondo Europeo de Desarrollo Regional) y los Fondos de Cohesión, dada la naturaleza de los gastos a los que se destinan estos fondos.
La cuenta financiera
La cuenta financiera registra las transacciones financieras; esto es, las transacciones de activos y pasivos financieros representativos del mantenimiento de riqueza, tales como dinero, créditos, títulos de propiedades industriales o de deuda pública o privada, o divisas. En España, de la misma forma que ocurre con otros países miembros de la Unión Económica y Monetaria (UEM), desde 2001 la cuenta financiera está estructurada diferenciado las operaciones financieras del Banco de España de las del resto de agentes económicos residentes.
En la balanza financiera las operaciones se anotan en función de si corresponden a una variación de pasivos (de los residentes en la nación frente a los no residentes) o una variación de activos (de los residentes frente a los no residentes). Los efectos económicos de las operaciones que suponen una variación positiva de pasivos (activos) financieros son similares a las que suponen ingresos (pagos) en la balanza corriente: un incremento (disminución) de la capacidad de pago de la economía frente al resto del mundo.
La cuenta financiera está estructurada en distintas subbalanzas, que se diferencian por el tipo de activos y pasivos financieros en que se materializan las operaciones correspondientes: inversiones directas; inversiones de cartera; otras inversiones; derivados financieros; variación de reservas de divisas; y, en España, al igual que en el resto de los países miembros de la Unión Económica y Monetaria (la zona euro), variación de los activos del Banco de España frente al Eurosistema (una subbalanza que no existe en otros países, como EEUU o Japón).
Los régimenes de Tipos de Cambio: Flexibles y Fijos
Existen diferentes regímenes de tipos de cambio en la economía mundial:
- Tipos de cambio flexibles (o de flotación libre): existe un tipo de cambio flexible entre dos monedas cuando éste se determina sin ningún tipo de restricción en el mercado de divisas.
- Flotación sucia: ocurre cuando, a pesar de la inexistencia de compromisos formales, las autoridades monetarias actúan en los mercados de divisas en un contexto de flotación libre para conducir los tipos de cambio de una o varias monedas hacia unos valores deseados y no siempre anunciados públicamente. Un ejemplo de este tipo de actuación sería el que llevó a las autoridades monetarias japonesas a intervenir en los mercados de divisas para evitar una apreciación excesiva de su moneda frente a la estadounidense.
- Tipos de cambio cuasi-fijos: existe un tipo de cambio cuasi-fijo entre dos monedas cuando existe algún tipo de restricción que limita la evolución en el tiempo del tipo de cambio a un determinado intervalo de valores. Normalmente el tipo de cambio está restringido dentro de bandas de fluctuación y es el banco central el encargado de mantener el tipo de cambio dentro de dichas bandas de fluctuación mediante compra o venta de divisas en operaciones de mercado abierto o mediante modificaciones de los tipos de interés de referencia. Suele tratarse de compromisos voluntarios de las autoridades monetarias de uno o más países para impedir grandes fluctuaciones del tipo de cambio. El Sistema Monetario Europeo fue un buen ejemplo de este régimen cambiario. En la actualidad se encuentran en este caso, por ejemplo, algunos de los países que esperan acceder a la UEM, como los países bálticos, y que tienen un tipo de cambio fijo con el euro con una banda del 15%.
- Tipos de cambio fijos: se trata de un compromiso firme de una o más autoridades monetarias por el que se fija un tipo de cambio permanente entre dos monedas que se anuncia como inamovible. Generalmente se considera que una moneda tiene un sistema de tipos de cambio fijos cuando fluctúa con un margen del 1% diario.
Tal como comentamos en la entrada anterior, llamamos apreciación-depreciación de una moneda a los cambios de valor de ésta en los mercados de divisas en virtud de las operaciones de compra-venta efectuadas por los diversos agentes que en ellos intervienen. Denominamos revaluación-devaluación a cambios en el valor de referencia de una moneda en el contexto de un sistema de tipos de cambio fijos o cuasi-fijos.
Tipos de Cambio
Un tipo de cambio es el precio de una moneda expresado en términos de otra. Se puede utilizar cualquiera de las dos monedas como numerario (como unidad de cuenta), de modo que para cada par de monedas existen dos formas indistintas de expresar su tipo de cambio:
- Tipo de cambio directo. También llamado cotización-precio o “convención europea”: precio expresado en unidades de moneda nacional por unidad de moneda extranjera; por ejemplo: 0,667 euros por dólar.
- Tipo de cambio inverso. También denominado cotización-volumen o “sistema británico”: precio expresado en unidades de moneda extranjera por unidad de moneda nacional -siguiendo el ejemplo anterior 1,5 (=1/0,667) dólares por euro.
Cuando una moneda gana (pierde) valor en el mercado frente a otras, dicho movimiento se denomina apreciación (depreciación); también suele hablarse de un fortalecimiento (debilitamiento) de la moneda. Únicamente en el contexto de un sistema de tipo de cambio fijo o cuasifijo es correcto hablar de revaluación (devaluación).
Tipos de cambio al contado (spot) y a futuro (forward)
Al igual que ocurre con otros activos financieros, existen mercados de divisas al contado y a futuro. Los precios de la misma divisa en ambos mercados (y para plazos distintos) no suelen coincidir:
- El tipo de cambio al contado es el que corresponde a transacciones de divisas que se hacen efectivas dentro de los dos días laborables siguientes.
- El tipo de cambio a futuro es el que corresponde a transacciones de divisas que se firman en un momento determinado pero que se hacen efectivas en el futuro (en la fecha especificada). Dicho tipo de cambio refleja las expectativas que tienen los inversores sobre el precio futuro de la divisa.
Tipos de cambio y competitividad-precio
El tipo de cambio efectivo de una moneda es su tipo de cambio promedio frente a un conjunto de monedas, y se calcula habitualmente como un promedio ponderado en función del peso de cada una de las monedas en el comercio exterior del país. El índice de tipo de cambio efectivo nominal (TCEN) mide la variación del valor medio de una moneda a partir de un promedio de sus tipos de cambio nominales (de mercado) bilaterales con el resto de monedas. El índice de tipo de cambio efectivo real mide, por su parte, la variación del valor medio de la moneda a partir de un promedio de los tipos de cambio reales bilaterales (el producto de los tipos de cambio nominales por el cociente de los índices de precios de las respectivas economías). Ambos tipos de cambio suelen expresarse en números índice, y lo verdaderamente relevante es que informan de la evolución de la competitividad-precio de un país teniendo en cuenta la variación del tipo de cambio de su moneda frente a las de los socios comerciales (tipo de cambio efectivo nominal) o, además, la evolución de los niveles de precios nacionales frente a los niveles de precios de socios (en el caso del tipo de cambio efectivo real) –este último es, sin duda, un indicador más apropiado de la evolución de la competitividad-precio.
Debe tenerse en cuenta que la ganancia o pérdida de competitividad-precio que experimenta cualquier país miembro de la Unión Económica y Monetaria (los dieciséis países de la Unión Europea cuya moneda es el euro) frente al resto de miembros de esta zona se debe exclusivamente a la evolución de los precios, dado que comparten una misma moneda.
La Prima de Riesgo
Definición de la Prima de Riesgo:
En el mercado de deuda pública, la prima de riesgo, también conocida como diferencial de deuda, es el sobreprecio que paga un país para financiarse en los mercados en comparación con otros países. Este diferencial de deuda es un tipo de prima de riesgo subjetiva o negociada, que refleja el consenso o estimación obtenido en los mercados financieros, su valor puede diferir de la prima de riesgo teórica, ya que se encuentra influida por rumores y su valor podría cambiar aún en presencia de informaciones económicas falsas.
De esta forma, cuanto mayor es el riesgo país, más alta será su prima de riesgo y más alto será el tipo de interés de su deuda. Dicho de otra forma, es la rentabilidad que exigen los inversores a un país para comprar su deuda soberana en comparación con la que exigen a otros países. La prima de riesgo significa, de este modo, la confianza de los inversores en la solidez de una economía.
Vamos a centrarnos exclusivamente en su definición para la deuda soberana de los países de la eurozona, ya que es la denominación más habitual en la prensa de hoy en día.
Dado que Alemania es el país más solvente de la zona Euro, el riesgo de impago de dicho país es el más bajo de la zona Euro y por tanto, es el país con quien compararse.
Si alguien quiere ver si un país de la zona Euro tiene un gran riesgo de no pagar su deuda basta con comparar la rentabilidad de su deuda pública con la rentabilidad de la deuda pública de Alemania, para el mismo plazo. Si la diferencia es muy grande, es que dicho país tiene un riesgo de impago mucho más alto que Alemania, es decir, la gente prefiere prestar dinero a Alemania, y si se lo presta al otro país es porque la rentabilidad es mucho mayor.
Esa diferencia entre los bonos de los países de la zona euro y los de Alemania, en puntos básicos (1% equivale a 100 puntos básicos), es lo que se denomina prima de riesgo.
¿Qué bono usamos para comparar?
El bono preferido para hacer las comparaciones es el de 10 años. Y esto es porque es un plazo razonable para evaluar los riesgos que tiene el país a medio plazo. A corto plazo el riesgo es más sencillo de evaluar, y a más largo plazo las incertidumbres son mayores. Por tanto el bono a 10 años es el que se usa de referencia.
Por otro lado, se usa la cotización de los bonos en el mercado secundario. Esto es, los bonos los vende (subasta) el Estado, y luego estos bonos cotizan en un mercado. Y es un mercado muy líquido, en cualquier momento se sabe cuánto vale un bono de un país u otro.
¿Cómo se calcula la prima de riesgo?
Lo primero es acceder a los datos del mercado secundario de deuda. Obtenemos la rentabilidad del bono alemán a 10 años. Luego obtenemos el del país del que queremos calcular la prima de riesgo, también del bono a 10 años. Restamos y así obtenemos la prima de riesgo de dicho país.
Variaciones de la prima de riesgo
A mitad de la década de 2000 vimos como la prima de riesgo de países del sur de Europa era prácticamente nula. Es decir, los inversores veían que prestar dinero a Alemania o a España era prácticamente lo mismo. En cambio ahora vemos como los países con problemas fiscales tienen primas de riesgo mucho más altas.
Y hay que recordar que la prima de riesgo sube por dos motivos. El primero, porque el riesgo de los países se dispare (o la percepción del riesgo se dispare); el segundo, porque ante esta subida del riesgo de estos países, los inversores busquen un país refugio, Alemania, y al comprar masivamente su deuda, el precio del bono aumente, o lo que es lo mismo, su rentabilidad disminuya. Y esto es lo que pasa cuando hay brotes de pánico, por un lado los inversores venden deuda de los países con problemas, y compran deuda alemana, con lo quela prima de riesgo sube por los dos efectos.
El BCE rebaja los tipos de interés al 0,25%
El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha optado por bajar los tipos de interés al 0,25% desde el 0,5% anterior. De este modo, el precio del dinero se sitúa en la zona euro en un nuevo mínimo histórico. La decisión supone una sorpresa, aunque algunos analistas ya habían hablado de la posibilidad de un descenso.
Los analistas señalaban que habían dos circunstancias que podrían justificar que el BCE situara los tipos de interés en un nuevo mínimo histórico: la fortaleza del euro y la baja inflación en la Eurozona, que se situó en octubre en el 0,7% (muy lejos del objetivo de la entidad de que se encuentre cerca pero por debajo del 2%).
El presidente del organismo, Mario Draghi, ha citado precisamente a la inflación como uno de los principales motivos para justificar su decisión de hoy. "La zona euro podría experimentar un prolongado período de baja inflación seguido por un movimiento gradual al alza de las tasas de inflación aún por debajo, pero cerca del 2%", ha señalado.
Draghi no ha querido concretar cuánto tiempo estará la inflación baja, pero ha advertido de que "no será un periodo breve". Sí que se ha mostrado más claro respecto a la posibilidad de que la zona euro caiga en deflación: "No lo vemos".
El banquero italiano ha explicado que ha habido unanimidad en el Consejo de Gobierno del BCE sobre la necesidad de actuar, aunque ha reconocido que no ha existido acuerdo sobre cuándo hacerlo, ya que ha habido miembros que apostaban por una bajada de tipos en diciembre en lugar de hoy.
Influencia de la decisión
La bajada de tipos y la consecuente depreciación del euro supondrán una ayuda para las empresas exportadoras de la zona euro. Entre ellas, las compañías españolas que están apostando por vender sus productos y servicios al extranjero para esquivar la fuerte caída de la demanda interna, fruto de la dura crisis económica del país.
Draghi ha señalado en la rueda de prensa que las medidas tomadas hoy por el el BCE también ayudará a que mejore la capacidad de financiación de las empresas.
Para mantener al mercado bien abastecido de liquidez, además de bajar los tipos, el BCE dará a los bancos toda la liquidez que necesiten hasta julio 2015, a una tasa de interés fija en su operación de refinanciación principal, la subasta semanal.
¿Miedo a la deflación?
"Iba a ser una reunión tranquila, pero el miedo a la deflación ha pesado en la decisión", opina el analista de XTB Joaquín Robles. La tendencia al alza del euro también habría motivado al BCE a rebajar de nuevo el precio del dinero, según los expertos.
"El mercado se lo ha tomado de forma fabulosa, porque demuestra que el BCE va a hacer todo lo que haga falta para que la recuperación en Europa sea real", ha apuntado el analista de Renta 4 Óscar Moreno. "Será otro balón de oxígeno para la economía", ha añadido.
Otra de las posibles claves que explican la bajada de tipos ha estado presente en la rueda de prensa de Draghi. "¿Tiene miedo a que Europa caiga en una situación similar a la que vivió Japón en los Noventa?", preguntó un periodista. "La situación no es similar", respondió el banquero italiano.
"La deflación de Japón comenzó con una desinflación prolongada, deterioro del crecimiento potencial, ajustes estructurales pendientes, debilidad de la banca. ¿Sus consecuencias? Tipos a la baja, capacidad de financiación privada volcada al sector público doméstico y una moneda apreciada nominalmente (depreciada en términos reales). No, no somos Japón. Pero inquietan las coincidencias", comenta José Luis Martínez, economista de Citi.
Fuente: http://www.eleconomista.es/
jueves, 7 de noviembre de 2013
El Banco Central Europeo (BCE)
El Banco Central Europeo (BCE) nos trae una breve y sencilla explicación de quiénes son y cuáles son sus responsabilidades.
¿Cuales son las tareas del BCE?
- La responsabilidad principal del BCE es definir y ejecutar la política monetaria de la zona euro, entendido como el mantenimiento de la estabilidad de precios. Esta estabilidad de precios la definen como el mantenimiento del nivel de la inflación por debajo, pero cerca del 2% en el medio plazo.
- El más importante de los cuales es su decisión sobre los tipos de interés que influyen en la economía y en los niveles de precios en la zona euro.
- Además, durante la crisis han utilizado temporalmente algunas medidas temporales que han contribuido al funcionamiento de la zona del euro. Esta es su explicación en muy pocas palabras de los muchos miles de millones inyectados a los bancos como vía para su inyección en la deuda soberana de los países europeos.
- Asegurar el funcionamiento correcto de los sistemas de pagos, para fomentar un sistema de pago en euros en toda Europa más rápido, más seguro y más fácil.
- Mantener y gestionar las reservas oficiales y de otros activos.
- La recogida y la elaboración de una amplia gama de estadísticas.
- La autorización de la emisión de billetes Euro por parte de los bancos centrales nacionales.
Explican que la inflación alta significa que los precios suben y que las personas no serían capaces de mantener su poder adquisitivo.
Para lograr este objetivo, nos comentan que tienen a su disposición varios instrumentos de política monetaria:
¿Quién forma parte del consejo de gobierno del BCE?
Cómo nos dice, el consejo de gobierno del BCE está compuesto por dos grupos, que juntos forman el Eurosistema:
- Los miembros del Comité Ejecutivo del BCE.
- Los gobernadores de los bancos centrales de los países miembros.
¿Cómo es la toma de decisiones del BCE?
En cuanto a la toma de las decisiones nos comentan que cada decisión importante la toma todo el consejo de gobierno del BCE. Los miembros del consejo representan la zona Euro en su conjunto y no son influídos por las características especiales de sus países. Además, cada miembro del consejo tiene un voto y el presidente es un voto más dentro del consejo.
martes, 5 de noviembre de 2013
El Producto Interior Bruto (PIB)
Inauguro el blog con esta primera entrada sobre uno de los indicadores más utilizados en la economía, el Producto Interior Bruto (PIB).
El PIB es la principal medida que se utiliza para medir la riqueza de un país. Podríamos definirlo como una medida macroeconómica que expresa el valor monetario de la producción de bienes y servicios de demanda final de una país durante un período determinado de tiempo (normalmente un año).
Existen varios métodos de determinación, aunque el más común es el método del gasto:
PIB= C+I+G+X-M
Dónde C es el consumo, I la inversión, G es el gasto público, X las exportaciones y M las importaciones.
Otra medida relacionada que nos interesa es el PIB per cápita, que se obtiene al dividir el PIB entre el número de habitantes, ofreciéndonos una medida del poder adquisitivo de los ciudadanos del país.
Países según su producto interior bruto estimado en 2008, según el Fondo Monetario Internacional

Países por PIB per cápita en 2008, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional.

El PIB es la principal medida que se utiliza para medir la riqueza de un país. Podríamos definirlo como una medida macroeconómica que expresa el valor monetario de la producción de bienes y servicios de demanda final de una país durante un período determinado de tiempo (normalmente un año).
Existen varios métodos de determinación, aunque el más común es el método del gasto:
PIB= C+I+G+X-M
Dónde C es el consumo, I la inversión, G es el gasto público, X las exportaciones y M las importaciones.
Otra medida relacionada que nos interesa es el PIB per cápita, que se obtiene al dividir el PIB entre el número de habitantes, ofreciéndonos una medida del poder adquisitivo de los ciudadanos del país.
Países según su producto interior bruto estimado en 2008, según el Fondo Monetario Internacional
Países por PIB per cápita en 2008, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional.

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